La Historia
Dónde, Cómo Y Cuándo…
El Ministerio Internacional Cosecha Mundial comenzó en los planes perfectos del corazón de Dios y fue puesto en corazones fuertes que deseaban vivir sus propósitos; estos son los de nuestros Apóstoles Martín y Kimberly Angulo.
El Apóstol Martín Angulo nació en Costa Rica el 12 de Marzo del 1957, en una familia de 8 hermanos. Siendo el primero de su familia en conocer y entregar su vida al Señor a sus 18 años, vivió una transformación radical en distintas áreas de su vida junto a experiencias sobrenaturales con Dios. Hoy, varios de sus hermanos se encuentran en su país natal, sirviendo en la visión de Cosecha Mundial.
A sus 19 años comenzó a predicar a personas de todas las edades en su iglesia, donde en una de estas oportunidades conoce a quien sería su esposa, nuestro Apóstol Kimberly.
El Apóstol Kimberly Hunt – Angulo, nació el 7 de Agosto de 1960 en Barron, Wisconsin, Estados Unidos, en una familia cristiana conformada por sus padres y 5 hermanos.
Desde pequeña apasionada por los negocios del Padre, y con la gran convicción de responder a su llamado.
Recibe la oportunidad de emprender un viaje misionero hacia México, el cual se ve modificado a ser en el país de Costa Rica. Por lo que a la edad de 17 años, emprende su primer viaje misionero hacia Costa Rica.
Fue en el primer momento en el año 1979, que ambos se encontraron y tuvieron la completa convicción del Espíritu Santo, que Dios tenía un propósito para ellos como matrimonio.
Luego de cuatro meses, en ese mismo año, en el mes de Noviembre, deciden ser uno caminando bajo un pacto de bendición, y contraen matrimonio en San José, Costa Rica.
Al tiempo, en el país de Costa Rica, nace su hija mayor Raquel, y tiempo después deciden mudarse a los Estados Unidos, donde nacen sus tres hijos Joseph, Rebekah y Rosita.
Como familia servían a Dios y a sus pastores de los Estados Unidos, hasta que entendieron el tiempo y el llamado de Dios de mudarse a la Argentina para establecer el Reino de Dios.
El 26 de Octubre de 1987 fue su primera pisada en tierraArgentina. Un “Sí” a Dios, que los ha llevado a más y ha sido de tremenda bendición para cada familia que los ha conocido, oído y que ha recibido de ellos, hasta el día de hoy.
